Hallan los cuerpos de un mexicano y un guatemalteco en un auto que cayó del puente de Baltimore
Los cuerpos del mexicano Alejandro Fernández Fuentes y el guatemalteco Dorlián Castillo fueron hallados hoy dentro de un vehículo que cayó al agua al derrumbarse un puente de Baltimore.
Los cuerpos sin vida de dos personas fueron hallados hoy 27 de marzo de 2024 dentro de un vehículo que cayó al agua al derrumbarse un puente de Baltimore, luego de que el carguero Dali perdió el control y se estampó contra la estructura.
El jefe de la Policía de Maryland, Roland Butler, dijo que los cuerpos del mexicano Alejandro Fernández Fuentes y el guatemalteco Dorlián Castillo, de 35 años y 26 años de edad, fueron encontrados dentro de una camioneta roja y que los familiares de ambas víctimas ya fueron informados del hallazgo de los restos.
Estaban bloqueados en el interior de "una camioneta roja sumergida a aproximadamente 25 pies", unos 7,5 metros de profundidad, informó Bulter. El sonar muestra que los vehículos están aprisionados entre los escombros de acero y hormigón del puente Francis Scott Key.
Ambos formaban parte del grupo de ocho trabajadores de la construcción que estaban tapando baches en el puente Francis Scott Key el martes de madrugada cuando el buque Dali embistió la infraestructura. Las autoridades aún no tienen claro si en el momento del accidente había algún vehículo en el puente, dado que la policía cortó su circulación cuando recibió la alerta de que el buque iba a chocar contra la infraestructura.
Buzos realizan trabajos para recuperar todos los cuerpos
Desde temprano, un grupo de socorristas realizó los trabajos para localizar los cuerpos de seis obreros mexicanos, guatemaltecos, hondureños y salvadoreños en las aguas heladas del puerto de Baltimore.
Los buzos recorren las aguas en "condiciones peligrosas" para intentar encontrar a las víctimas, explicó el gobernador del estado de Maryland, Wes Moore. Algunas son de México, El Salvador, Guatemala o Honduras.
Los socorristas trabajan en condiciones difíciles: "temperaturas gélidas, marea alta, vientos fuertes y trozos de metal retorcidos", dijo.
En medio de la niebla y el frío, hay barcos de la guardia costera y de la policía desplegados muy cerca de los escombros y del portacontenedores averiado.